Bajo Cinca / Baix Cinca

La comarca asentada en la vega final del Cinca se encuentra encajada en los llanos calcáreos monegrinos, Llanos de las Menorcas y Llanos de Cardiel, al sur del Somontano de Barbastro y la comarca del Cinca Medio, en el límite de la provincia de Huesca con Lérida. La zona está repleta de construcciones de la época medieval, destacando el conjunto histórico de Fraga donde sobresale el estilo románico, además de otras poblaciones como Chalamera, Ballobar, Ontiñena y Candasnos, no sin cierta transición del gótico. Se pueden observar construcciones civiles que se recortan en los altozanos de algunas localidades como los castillos y las torres de Mequinenza y Chalamera. En las iglesias parroquiales de Zaidín, Velilla de Cinca, Osso y Torrente de Cinca sobresale el estilo barroco. El peso histórico de la comarca descansa en su mayor parte sobre el municipio de Fraga. Reconquistada por las tropas aragonesas en 1093 y recuperada de nuevo por el rey moro de Zaragoza. Alfonso I el Batallador sufrió una importante derrota ante los muros de la plaza, aunque fue arrebatada por Ramón Berenguer IV en el año 1149. Perteneció durante un par de siglos a Cataluña hasta formar parte del reino de Aragón en 1336 bajo el mandato de Pedro el Ceremonioso. La mayoría de sus núcleos de población supera los mil habitantes, manteniendo una población estable a pesar de haber pasado por algún período de resgresión demográfica a lo largo de este último siglo. El sector dedicado a los servicios predomina en la comarca, en detrimento de la agricultura que se relega a un segundo lugar, delante de la construcción y la industria. La localidad de Fraga, seguida de la de Mequinenza, es el motor principal de toda la comarca, acaparando la mayor parte de los servicios. En cuanto a Mequinenza, su importancia se ha visto menoscabada debido a la anegación de aguas provocada por el pantano de su mismo nombre y el Riba- Roja. La superficie restante queda destinada a campos labrados con sistema de regadío en los ríos Alcanadre y Cinca, el resto queda para tierra de secano donde predominan el cereal y el viñedo. Merece la pena visitar el Aula de la Naturaleza de la Estación Ornitológica del Bajo Cinca, situada en Mequinenza, y los fenomenales parajes de las sierras de Mequinenza y los Rincones, bajo cuyos pinos vive un número importante de ciervos.

Lugares para visitar

Poblaciones de la comarca